El objetivo primordial del verano entre las personas que se preocupan por su imagen y apariencia es lograr un bonito bronceado. Esto lleva a que usemos métodos dudosos a la hora de conseguir un cuerpo tostado. Pero, ¿son fiables y ciertos?
La Coca-Cola ayuda a broncearte la piel
La Coca-Cola ayuda a broncearte la piel
La famosa marca de bebidas refrescante ha sido extendida sobre los cuerpos de las personas deseosas de un moreno envidiable, pero este cuento es solo eso, un cuento.
La coca-cola únicamente ayuda a teñirnos la piel durante el tiempo de la exposición por sus componentes y su color, pero en realidad, echarnos la bebida sobre el cuerpo solo conseguirá que estemos totalmente expuestos al sol sin ninguna protección y que todo insecto presente a nuestro alrededor use nuestra piel como vivienda.
A falta de Coca-Cola, bueno es el aceite de oliva. Las personas han optado por esparcirse por todo el cuerpo este caro elixir para así conseguir el moreno perfecto y uniforme. Pero la idea de que el aceite de oliva, o el de girasol, ayudará a tu bronceado, es totalmente falso.
La única propiedad con la que cuenta el aceite de oliva es que si lo ingerimos habitualmente, junto con otros productos ricos en vitaminas y minerales concretos, una vez conseguido el moreno, este se prolongue durante el mayor tiempo posible.
Las pieles morenas y su inmunidad
Frases similares a "¡Qué suerte tienes de ser moreno! ¡No tienes que usar crema!" son muy oídas durante el transcurso de todo el verano. Y es que, tener la piel morena, parece ser el mejor protector solar natural.
Pero esta afirmación carece de fiabilidad y autenticidad. Las personas morenas, aunque posean un melanina distinta y menos sensibles a los rayos solares, se queman y tienen riesgo de sufrir problemas serios de piel a causa del sol, por lo que deben tomar las mismas precauciones.
Rayos UVA antes de rayos solares
Ante la vergüenza de exponernos en la playa sin color alguno, muchas personas optan por tomar previamente rayos UVA, con la creencia añadida de que así el bronceado se conseguirá antes.
Por una parte, es totalmente erróneo pensar que con esta practica la piel es preparada para su exposición al sol, y por otra, hay que aclarar que el bronceado de rayos UVA puede resultar realmente dañino.
La radiación ultravioleta de los aparatos de bronceado es mucho mayor que la del sol y además está más concentrada, lo que potencia la probabilidad de modificar el ADN celular, lo que deriva al cáncer cutáneo, perder elasticidad en la piel, reacciones alérgicas, y evidentemente, quemaduras.
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